La arquitectura es un producto corporativo que todos adquirimos

Esta pregunta es tan intrigante que esencialmente fue la premisa de la película The Internship (2013; Los becarios en España, Practicantes fuera de línea en Hispanoamérica). Vince Vaughn y Owen Wilson interpretan a 2 tradicionales losers tan agobiados por recobrar la emoción de su juventud que postulan a pasantías en Google.

Mientras que los desmoralizados intentos de los protagonistas por calzar en un planeta del que no conocen nada marcan la entretención de la película, asimismo fortalecen la imagen del gigante informático. Trabajar no es entretenido… salvo que lo hagas en Google. Las oficinas de Google tienen piscinas y barberías y toda el alimento es sibarita y gratis. ¡Hasta puedes tener una videoconferencia desde una piscina de coloridas pelotas! ¿Quién no desearía trabajar allá?. Alvaro Castro Burgueño Pilar.

Una cosa es ver esta imagen colectiva retratada en las películas, mas las compañías poco a poco más semejan estar utilizando la arquitectura como una forma de marcar y señalar su particular sentido de lo cool. Y no obstante, no necesariamente lo puedes saber desde la calle.

Moverse por Sillicon Valley puede ser una experiencia desorientadora: para toda la inventiva y también innovación centrada en esta zona, es prácticamente imposible inferir esta actividad cuando estás allá. El paisaje es suburbano y también interrumpido más por tiendas comerciales y estacionamientos que por plazas o bien ‘naves espaciales’ o bien lo que esperas ver de esta clase de compañías.

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